¡EMPIEZA!
Los perros y (los humanos) necesitan hacer ejercicio, pero a diferencia de nosotros (yo), la mayoría de los perros disfrutan realmente de la actividad y están esperando para salir a la calle. Mientras que nosotros podemos sentirnos inspirados de repente para hacer ejercicio de forma espontánea, cuando se trata de nuestros perros, es importante asegurarse de que tu perro esté preparado para cualquier cambio en sus niveles de actividad. Si tu perro ha estado sin actividad durante un año o tiene dolencias físicas, un día de actividad podría convertirse rápidamente en algo doloroso.
Hemos reunido un par de cosas que hay que tener en cuenta antes de cambiar el régimen de ejercicio de tu perro para asegurarse de que se sienta sano y feliz.
EVALÚA LA EDAD DE TU PERRO
Antes de lanzarte a un nuevo programa de ejercicios, es importante comprobar el nivel físico de tu perro con respecto a las exigencias de la actividad y decidir si está preparado para afrontarla sin miramientos o si necesita algo de tiempo para entrenarse.
Hay muchos factores que deben tenerse en cuenta al iniciar un nuevo régimen. Un buen punto de partida es la edad, la salud y la raza de tu perro.
Cachorro: ¿Cuánto ejercicio necesita un cachorro?
Los cachorros tienen mucha energía, pero necesitan un ejercicio diferente al de los perros adultos. Dado que el cuerpo de los cachorros aún se está desarrollando, los paseos cortos y las sesiones de juego son mejores que los paseos largos o los lanzamientos de pelotas en el parque, ya que suponen un menor esfuerzo para su cuerpo. Cada cachorro necesita una cantidad diferente de ejercicio para mantenerse contento y sin problemas, así que vigila su comportamiento y cambia su rutina si es necesario.
Evita ejercitar en exceso a tu cachorro. El exceso de ejercicio de los cachorros puede afectar negativamente a su desarrollo musculoesquelético y es especialmente peligroso para los cachorros de razas grandes y gigantes. Algunas razas de perros grandes y gigantes pueden seguir creciendo hasta los 18-24 meses de edad, por lo que es importante tomarlo en cuenta a la hora de planificar su rutina de ejercicios.
Adulto: ¿Cuánto ejercicio necesita un perro adulto?
Habrá muchas variables diferentes que afectarán a la cantidad de ejercicio que necesitará tu perro (más adelante veremos algunas de ellas) pero, sea cual sea la cantidad, tu perro necesitará hacer ejercicio con frecuencia. Algunos perros pueden limitarse a dar un paseo de media hora alrededor de la manzana, pero los perros de trabajo y las razas activas necesitarán entrenamientos más largos e intensos para mantener sus niveles de energía bajo control.
Presta mucha atención al comportamiento de tu perro, ya que el paso, la inquietud y el mal comportamiento pueden ser señales de que necesita más actividad o estimulación física.
Adulto mayor: ¿Cuánto ejercicio necesita un perro adulto mayor?
La cantidad de ejercicio que necesitará tu perro adulto mayor dependerá de su estado de salud y de sus niveles de energía. Los perros adultos mayores pueden tener niveles de energía más bajos y a menudo tienen problemas de salud que podrían significar que algunas actividades son demasiado difíciles.
Los problemas articulares pueden dificultar la realización de ejercicios de alto impacto, como la carrera y la agilidad, mientras que las afecciones respiratorias o cardíacas pueden limitar la gama de actividades disponibles a ejercicios más suaves. Esto no significa que debas olvidarte del ejercicio, ya que las cantidades adecuadas pueden ayudar a aliviar el dolor articular, prevenir el aumento de peso y mantener el tono muscular. Si sigues interesado en las necesidades de los perros adultos mayores, consulta nuestro blog sobre perros adultos mayores para obtener más información sobre sus necesidades nutricionales, de salud y de ejercicio.
AFECCIONES DE SALUD
Los problemas médicos evidentes, como la artritis, las enfermedades cardíacas, las enfermedades de los discos intervertebrales, los problemas pulmonares (incluida la enfermedad del gusano del corazón) y la obesidad, pueden limitar la tolerancia del perro a la actividad. Si tu perro no ha sido examinado por un veterinario recientemente o tiene más de 7 años, hazle un chequeo previo con tu veterinario antes de empezar un nuevo deporte.
Casi la mitad de los perros pastores australianos* tienen sobrepeso u obesidad, lo que puede limitar la movilidad y la resistencia de tu perro. Si estás introduciendo una nueva actividad para tu perro o quieres aumentar la cantidad de ejercicio, debes hacerlo gradualmente para que tu perro pueda acostumbrarse a los cambios y minimizar las lesiones.
Para que vuelva a tener un peso saludable, tendrás que asegurarte también de que recibe la nutrición adecuada. Acude a tu veterinario para que te indique la ingesta diaria de calorías recomendada o si necesitas una dieta especializada y asegúrate de limitar los premios grasientos o los restos de comida debajo de la mesa.
RAZA
Algunas razas de perros se adaptan bien a ciertas actividades. A los perros de agua y a los cobradores les encanta nadar y buscar, mientras que los perros de pastoreo y de trabajo disfrutan con los ejercicios de agility. La mayoría de los perros medianos son buenos compañeros para correr, pero los perros de cualquier tamaño estarán encantados de dar un paseo o una caminata.
Las razas con mucha energía, como los Border Collies y los Kelpies, pueden realizar ejercicios intensos que a un Basset Hound o a un perro pequeño le resultarían difíciles. Si tienes un estilo de vida muy activo y estás dispuesto a llevar a tu perro a hacer ejercicio, es posible que una raza pequeña de tipo toy no sea la adecuada para ti. Habla con tu veterinario y pídele que te recomiende algunos ejercicios adecuados y no tengas miedo de experimentar con actividades.
QUÉ DEBES TOMAR EN CUENTA ANTES DE EJERCITAR A TU PERRO
Da pequeños pasos cuando introduzcas el ejercicio y no esperes que tu perro se convierta en un atleta de la noche a la mañana. Si tienes expectativas poco razonables, podrías presionar a tu perro para que haga algo para lo que no está preparado y hacerlo correr el riesgo de lesionarse.
Si estás preparando a tu perro para que se convierta en tu compañero de carreras, empieza con una carrera corta de 10-15 minutos alrededor de tu manzana o en algún lugar al que esté acostumbrado. Cuando estés seguro de que se siente cómodo con la distancia, puedes aumentar la distancia en incrementos de 500 metros.
Lleva todo lo que puedas necesitar para mantener a tu perro ocupado y cómodo, como premios, tazones de agua plegables, juguetes y bolsas de basura.
QUÉ DEBES TOMAR EN CUENTA MIENTRAS EJERCITAS A TU PERRO
Mientras hacen ejercicio, debes vigilar cuidadosamente el estado de tu perro. Vigila de cerca sus afecciones y, si ves el más mínimo signo de malestar o fatiga, reduce la velocidad y deja que descanse.
Si tu perro se detiene para descansar o se tumba, dale un respiro y espera a que se levante y esté listo para continuar. Si está muy fatigado, será mejor dar por terminado el ejercicio y no arriesgarlo a sufrir una lesión. El ejercicio debe ser algo que tanto tú como tu perro disfruten.
Las zonas sin correa pueden ser lugares estupendos para que tu perro controle su propio nivel de ejercicio. Deja que tu perro corra, juegue y descanse a su propio ritmo. Los parques para perros son una buena forma de socializar con ellos, pero otros perros podrían excitarlos en exceso, así que asegúrate de que no se esfuercen demasiado y de que tomen muchos descansos para beber.
Un gran problema en las zonas cálidas y húmedas es el peligro de insolación. Las razas braquicéfalas (de nariz corta), como los bulldogs y los pugs, son especialmente vulnerables a la intolerancia al calor. Intenta evitar llevar a tus perros a hacer ejercicio durante las horas más calurosas del día y mantente atento a cualquier signo de deshidratación o golpe de calor como:
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Babeo excesivo
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Jadeo intenso y continuo
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Lengua agrandada o aplanada
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Pereza
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Ojos nublados o vidriosos
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Aumento del pulso
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Vómitos
Si observas alguno de estos signos, detente inmediatamente y llévalo a un lugar fresco y a la sombra para que descanse. Refréscalo y luego lleva a tu mascota a la clínica veterinaria más cercana para que reciba tratamiento.
DESPUÉS DE EJERCITAR A TU PERRO
Después de un buen entrenamiento, ofrece a tu perro un poco de agua y asegúrate de que se mantiene hidratado. También quieres que disfrute de la actividad, por lo que el refuerzo positivo y las recompensas después de una sesión pueden ayudar a que aprenda a amar el ejercicio.
Los perros también pueden tener los músculos agarrotados después del ejercicio. Para aliviar el dolor, masajea suavemente sus músculos doloridos o pide a tu veterinario uno de los numerosos analgésicos seguros y eficaces para perros
TIPOS DE EJERCICIO
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Excursionismo con mochila: Una mezcla de senderismo y trineo, los dueños y los perros se conectan utilizando un arnés especial de manos libres para ir de excursión. Una forma estupenda de disfrutar del aire libre a tu propio ritmo, las caminatas van desde una distancia corta para los cachorros hasta caminatas de 65 km que duran tres días.
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Obediencia: Tanto un ejercicio físico como mental, los perros aprenden nuevos comandos y trucos como recuperar, zigzagear, entre otros.
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Deportes caninos: Con una enorme variedad de deportes caninos, seguro que hay uno para ti y tu perro. Los circuitos de señuelo, la obediencia, el flyball, el treibball, los deportes de disco, el trabajo con olores y los deportes de agility son solo alguna de las opciones que puedes elegir.
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Natación: Un ejercicio de bajo impacto perfecto para los perros que puedan tener problemas articulares. La natación es algo natural para la mayoría de los perros y puede ser una forma estupenda de mantenerse fresco cuando hace calor.
Tanto si tu perro es un cachorro como un adulto, el ejercicio debería formar parte de su rutina diaria. Desempeña un papel importante en la salud física y mental de tu perro y lo expone a nuevos estímulos, lo que contribuye a su desarrollo.
Llevar a tu perro a parques y zonas aptas para perros también ayuda a socializarlo con otros perros, lo que puede ayudar a controlar su comportamiento. No hay que olvidar que también es una forma estupenda de hacer ejercicio mientras creas un vínculo con el perro.
